Muchas personas están
interesadas en recibir una terapia de
Reiki por motivos de enfermedad, buscando el alivio de sus dolencias físicas.
En muchas ocasiones, la mejoría física es rápida. Es muy común ver que tras una
sesión de Reiki, una persona con alguna molestia, por ejemplo, dolor de cabeza o de estómago,
se siente mejor y te dice: “Pues ahora no me duele”.
Sin embargo, Reiki va
mucho más allá. La energía va a la causa profunda que generó el dolor o la
enfermedad. Somos seres holísticos y
generalmente los síntomas físicos, son la “punta del iceberg”. Nuestras
emociones y pensamientos influyen en nuestro cuerpo mucho más de lo que nos
imaginamos. Nada está separado. Reiki es una terapia holística y como tal,
actúa en nosotros armonizando y disolviendo bloqueos. La energía fluye allí donde
más se necesita.
Es también algo común
que cuando recibimos una terapia con Reiki (sobre todo por primera vez) en los
2 o 3 días sucesivos se continúen eliminando bloqueos y nuestros síntomas,
parezcan empeorar. Nos podemos sentir más emotivos, irascibles o incluso
ciertos dolores parezcan volver.
No hay que alarmarse. Eso indica que la
energía de Reiki está haciendo su trabajo. Es lo que podemos llamar crisis de sanación. Parece que hay un
empeoramiento antes de mejorar. Un ejemplo práctico es cuando recibimos un
masaje muscular debido a una contractura. En cierta medida nuestro dolor
muscular desaparece tras la sesión pero podemos pasar un par de días doloridos
porque esa zona ha sido trabajada y después sentimos la mejoría. De igual modo, cuando cambiamos nuestra dieta
e introducimos nuevos elementos, parece existir una reacción de nuestro cuerpo.
Cuando esto ocurre,
no es momento de abandonar, sino todo lo contrario. En las siguientes sesiones del tratamiento, la
energía de Reiki irá profundizando equilibrando nuestro cuerpo, mente y
emociones. Siempre me gusta recordarles esto a mis pacientes. No tiene por qué
ocurrir forzosamente, pero entra dentro
de las posibilidades y de esta forma estarán más abiertos a comprender el
proceso que su cuerpo está viviendo.
Reiki trabaja en
todos los aspectos de nuestro Ser llevándonos al equilibrio y armonía que necesitamos.
By: Ángeles Torres