10 de septiembre de 2015

SER CONSCIENTES DEL SUBCONSCIENTE





La mente humana es un misterio que va revelando sus secretos gracias a la ciencia. En los últimos tiempos hemos avanzado mucho al respecto y estamos entendiendo cómo técnicas ancestrales o la meditación están encontrando una explicación científica.  

Básicamente nuestra mente se divide en Mente Consciente y Mente Subconsciente.  Se dice que tenemos una media de 60.000 pensamientos al día, de los cuales, la mente consciente procesa más o menos un 5%. El 95% restante lo hace la mente subconsciente. 

La Mente consciente se aloja en el hemisferio izquierdo del cerebro y es la que controla nuestra capacidad de razonar, memorizar, ordenar, organizar etc. En definitiva es lo que “controlamos”. 

La Mente Subconsciente se ubica en el hemisferio derecho del cerebro. Es la parte sobre la cual no tenemos control.  Se relaciona con la intuición y todo lo que escapa a nuestra “lógica”. En el subconsciente se almacenan todos nuestros hábitos, valores, experiencias y creencias a lo largo de nuestra vida. Podemos decir que funciona en  "piloto automático"

Si comparamos nuestro cerebro con un ordenador, nuestro subconsciente sería el “software” que lo hace funcionar. Por tanto,  dependiendo de la naturaleza de ese “software” atraeremos a nuestra vida experiencias y resultados más o menos positivos. 

Por supuesto nadie quiere sufrimiento en su vida ni circunstancias adversas, sin embargo, a menudo nos encontramos atrapados en situaciones  que no sabemos cómo resolver, y que se repiten de una forma u  otra en nuestra vida. Ponemos todo nuestro empeño en encontrar una solución pero no conseguimos encontrarla.  Es en esos momentos, cuando es interesante que nos detengamos por unos momentos y nos observemos para entender cuáles son los mecanismos nos mueven. Prestemos atención al tremendo poder de nuestra mente subconsciente. Ella controla el desarrollo de nuestra vida y allí se alberga la esencia de nuestro ser.  


Una forma sencilla es ver nuestra mente como un jardín. Tú eres el jardinero que planta semillas de pensamientos en tu mente subconsciente continuamente. Todo lo que sembramos en la mente subconsciente lo cosechamos en nuestro cuerpo y en nuestras experiencias. Por tanto, la calidad de nuestros pensamientos determinará la “cosecha” que recogeremos en nuestro cuerpo y en  nuestra vida. 

“Siembra un pensamiento y cosecharás un hecho.
Siembra un hecho y cosecharás un hábito.
Siembra un hábito y cosecharás un carácter.
Siembra un carácter y cosecharás un destino”
                                                         Aristóteles

Revisemos qué patrones mentales tenemos y cuáles son nuestras creencias acerca de nosotros mismos y nuestro entorno. Al igual que un espejo, la vida nos devuelve el reflejo de lo que emitimos, en la mayoría de los casos, de forma inconsciente.   Es posible que repentinamente, encontremos la respuesta que necesitamos cuando descubramos una creencia o patrón que nos limita y nos está impidiendo conseguir lo que queremos y nos merecemos.  
Tenemos en nuestras manos la capacidad de moldear nuestra vida y vivirla de una forma plena y feliz. ¡No te conformes con menos!

Escrito por: Ángeles Torres