14 de mayo de 2014

CRISIS DE SANACIÓN CON REIKI




Muchas personas, tras recibir las primeras sesiones de Reiki experimentan cambios en su organismo que pueden resultar molestos. Esto También sucede en alumnos de Reiki tras recibir la inciación, en personas que cambian su dieta y también en casos de desbloqueos emocionales.
Es habitual que una persona que desconoce el mundo de Reiki, decida recibir una sesión para probar y que en los días posteriores pueda tener sensación de nauseas, diarrea, dolor de cabeza  o simplente se encuentre con las emociones a flor de piel. Entonces, la persona piensa que Reiki no solo no le ha reportado ningún beneficio, sino que además  ha causado trastornos en su organismo.


¿Qué es exactamente una crisis de sanación?

Es un proceso que se activa en nuestro ser, mediante el cual nuestro cuerpo físico  elimina toxinas acumuladas en nuestro organismo y libera emociones de nuestro cuerpo mental-emocional poniendo de manifiesto los patrones mentales que son nocivos para nosotros.

SÍNTOMAS FÍSICOS:

Incremento del sudor:  
Puedes notar que tu sudoración aumenta, algo muy normal, ya que esta es una forma que tiene nuestro cuerpo de eliminar toxinas.
Incremento de la orina:  
Otra vía de escape para la eliminación de toxinas es a través de la orina. Nuestros riñones regulan la cantidad de ciertos elementos en la sangre y los sobrantes son expulsados mediante la orina. Podemos observar que cambia su color y densidad.
Incrementos de las evacuaciones: 
Del mismo modo, a través de las heces nuestro cuerpo “se libra” de lo que no necesitamos.
Salpullidos:  
En algunas ocasiones, puede aparecer una ligera erupción cutánea durante un par de días. Lo mejor es dejar que siga su proceso.
Resfriados o Gripe:    
A medida que los pulmones se limpian muchas personas desarrollan síntomas de resfriado o gripe. El cuerpo emplea este sistema para eliminar mucosidad y elementos que ya no desea.
Nauseas:  
Puede ocurrir aunque no es muy común.
Dolor de cabeza:  
La eliminación de toxinas puede producirnos dolores de cabeza, que pasarán una vez que las hayamos eliminado.
Antiguos dolores: 
Es frecuente que reaparezcan síntomas de antiguas dolencias que 
creíamos ya curados. Por ejemplo, si hemos tenido un esguince reaparece el dolor. Generalmente se debe a que no quedaron totalmente curados en el pasado y Reiki los pone de manifiesto. Es una buena oportunidad para sanarlo definitivamente.

SÍNTOMAS EMOCIONALES:

Las toxinas emocionales también han de eliminarse. Somos cuerpo, mente, emoción y espíritu. No olvidemos que Reiki es una terapia holísitica y actúa en todos los niveles, por esos durante el proceso de sanación podemos pasar por distintos estados anímicos. Podemos sentir ira, miedo, tristeza, euforia, llanto.
Son emociones que nos pueden estar bloqueando y salen a la superficie para ser sanadas.

En definitiva, si tras una sesión de Reiki experimentas algunos de estos síntomas, eso significa que la energía de Reiki está trabajando en ti y llevando a cabo la sanación de tu ser.
Generalmente, estos síntomas duran 2 o 3 días, aunque puede variar de unas personas a otras.
Es importante no abandonar el tratamiento ya que tu cuerpo, mente y espíritu está liberándose de lo que es nocivo y se está reequilibrando. Si necesitas alguna aclaración, puedes consultarlo con tu terapeuta o maestro de Reiki.

Yo comparo una crisis de sanación a una limpieza profunda en casa. Antes de ver nuestro hogar limpio  y renovado, tenemos que mover muebles, vaciar armarios y sacar todo aquello que ya no
nos sirve. A todos nos ha pasado, que durante la limpieza, han aparecido cosas que creíamos olvidadas, pero aún están ahí, ocupando un espacio. No es un proceso cómodo, pero después nos encanta ver el resultado...


Publicado por: Ángeles Torres